Sexta-feira, 27 de Novembro de 2009
Respira el Universo.
Expande las olas del fuego Sagrado
mientras agota chispas primordiales
que retornan al principio del Silencio.
La Creación es el Himno Supremo
que exhalan las criaturas de Prometeo
con la conciencia de su misión,
conservando el equilibrio de lo eterno.
El mar palpita en las cuerdas,
los bosques agitan el bronce,
llama viva acrecentada brota en cada nota,
el aire juega enamorado
envolviendo a Natura con su danza.
Todo fluye, se extiende, se contrae.
El insoslayable compás del pizzicato
ajusta la permanencia de la Esencia
en soberbia factura.
Cántico conciente, grito agradecido.
Sólo el sucederse, el silencioso devenir,
la Belleza aflorando eterna
besando de continuo a la Conciencia,
mansamente, sellando a cada instante el pacto
por el cual cada eslabón es necesario y
a la vez irrepetible
en la colosal cadena de la Vida.
El Sol, con su apariencia de quietud solemne,
realeza y oro,
sonríe agradeciendo
su nuevo día en la creación sin límites.
Giro esencial,
voluta de energía,
espiral sin fin
en la oscuridad-luz de la galaxia,
vórtice primigenio,
corazón cósmico que no muere y se renueva,
mi ser, partícula de Luz
micronésima y precisa,
en su expresión exacta y rigurosa,
recibe el hálito del Amor Universal
y continúa.

© Alberto Peyrano
(Necochea, Argentina, enero 2008)
***
HINO SUPREMO
O Universo respira.
Expande as ondas do fogo sagrado,
enquanto exaure as centelhas primordiais
que regressam ao princípio do Silêncio.
A Criação é o hino supremo
que as criaturas de Prometeu exalam,
conscientes da sua missão
de conservarem o equilíbrio do eterno.
Na melodia transcendental,
o mar palpita nas cordas,
os bosques agitam o bronze,
de cada nota, em crescendo, uma chama viva brota,
o ar diverte-se, enamorado,
enlevando a Natureza na sua dança.
Tudo flui, tudo se expande, tudo se contrai.
O arrebatado compasso do pizzicato
determina a permanência da Essência
numa revelação sublime.
Cântico da consciência, agradecido clamor.
Constante e só, o silencioso acontecer
na Beleza que se descobre eterna,
beijando continuamente a Consciência
e selando mansamente, momento a momento, o pacto
onde cada elo é necessário
e sempre irrepetível
na admirável cadeia da Vida.
Solene, na sua aparente quietude,
o Sol — todo majestade e ouro —sorri agradecendo
o alvor de cada novo dia, numa criação sem limites.
Movimento essencial,
voluteia de energia
numa espiral infinita
no breu-luz da galáxia.
Vórtice primigénio,
coração cósmico que imorredouramente se renova,
meu ser, partícula de luz
microscópica e precisa
numa expressão exacta e rigorosa,
recebe o hálito do amor universal
e continua.
Versão em português de
José-Augusto de Carvalho
(Viana * Évora * Portugal, Janeiro de 2008)
Migrando para este novo espaço.


publicado por Do-verbo às 09:02
Desandar, como quien evoca
 
las horas incontables de la ausencia,

el yo, desesperado en la sordera

de parajes oscuros,

de ignotas caminatas

a la orilla de lagos que abrían en sus huecos

la promesa silenciosa de una luz mortecina,

al menos para saber que allí

la esperanza latía en agonía.

El viento, viejo amigo,

rugía en el ocaso anunciando

los apocalipsis de mis horas vanas

y el mar era besado

por un cielo gris

que bajaba sediento hasta sus aguas.

La niebla me envolvía.

Mi rosario de penas

desgastó mis dedos moribundos

junto al poema póstumo

de tu despedida.


© Alberto Peyrano© 2006Buenos Aires, Argentina
Migrando para este novo espaço.


publicado por Do-verbo às 08:41
Registo de mim através de textos em verso e prosa.
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